El momento de la despedida habia llegado y no solo por parte de nuestras vidas sino tambien por parte de su muerte. Al llegar a planta baja y descender nuevamente por lo escalones de marmol, cada uno tomo su camino. La manada habia sido dividida.
Obligados, subieron a distintos autos cambiando su piel por trajes negros.
Firmaron y pagaron todo lo debido por esa cita tan esperada con la muerte.
Sus tan hambrientos estomagos tuvieron que cerrarse y toda la noche solo pudieron pensar en dos velas alrededor de ella. Un cristo, y un mensaje insignificante
"Que en paz descanse"
Una camarera abusrda recorria el cuarto invitando a todos con cafe o cortado. Sus piernas simulaban ser otro candelabro mas de la habitacion oscura.
El lobo morado habia cumplido su sueño y todos alli lo estaban mirando y todos alli estaban llorando.
10 minutos despues, el lobo menor convertido en traje negro entro por la puerta grande con un sobre en la mano.
Era una carta, que empezaba asi:
"..."
martes, agosto 02, 2005
life on mars (parte 1)
siguiendo en la espera vacacional y convencido aun de sentir que mi suerte empezaba a cambiar, llego el dia que no estaba esperando.
Luego de la visita rutinaria al medico y de la llegada a mi casa, el telefono comenzo a sonar. Gritaban y lloraban pero no sabiamos que hacer. Desesperados como manadas hambrientas de lobos corrimos al auto y arrancamos a maxima velocidad. Las caras de los acompañanates iban variando a medida que llegabamos al destino incierto.
Una vez alli, uno de los lobos dejo al grupo y decidio tomar un atajo, no supimos nada de el hasta despues de ocurrido el hecho.
Cuando subimos los 153 mil escalones de marmol y vimos mas de 354 caras enfermas, nos desplomamos al ver la cara de la muerte, acostada, alli, burlandose de nuestras vidas. Ojos cerrados, piel blanca y boca abierta. Recostada, mientras uno de los lobos atino y avanzo entre los espectadores para arrojarse cerca a aullar.
Otro compañero esperaba cerca y fue el momento de desesperacion en el cual no abraze a nadie, solo abraze a mi corazon, que latia cada segundo aumentando su ritmo y velocidad.
10 minutos mas tarde, un humano aparecio mostrando los papeles que debiamos firmar.
el lobo que tomo el atajo quedo encerrado, y momentaneamente nadie podia reparar en el.
Luego de la visita rutinaria al medico y de la llegada a mi casa, el telefono comenzo a sonar. Gritaban y lloraban pero no sabiamos que hacer. Desesperados como manadas hambrientas de lobos corrimos al auto y arrancamos a maxima velocidad. Las caras de los acompañanates iban variando a medida que llegabamos al destino incierto.
Una vez alli, uno de los lobos dejo al grupo y decidio tomar un atajo, no supimos nada de el hasta despues de ocurrido el hecho.
Cuando subimos los 153 mil escalones de marmol y vimos mas de 354 caras enfermas, nos desplomamos al ver la cara de la muerte, acostada, alli, burlandose de nuestras vidas. Ojos cerrados, piel blanca y boca abierta. Recostada, mientras uno de los lobos atino y avanzo entre los espectadores para arrojarse cerca a aullar.
Otro compañero esperaba cerca y fue el momento de desesperacion en el cual no abraze a nadie, solo abraze a mi corazon, que latia cada segundo aumentando su ritmo y velocidad.
10 minutos mas tarde, un humano aparecio mostrando los papeles que debiamos firmar.
el lobo que tomo el atajo quedo encerrado, y momentaneamente nadie podia reparar en el.
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